"Sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a su propósito. A los que de antemano conoció, también los predestinó a ser hechos conforme a la imagen de Su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos. A los que predestinó, a esos también llamó. A los que llamó, a esos también justificó. A los que justificó, a esos también glorificó"
(vv. 28-30)
ORA, LEE Y MEDITA
En la carta de Pablo a los Romanos 8:26-30.
Dios no muestra favoritismo, no obstante, sí disfruta de la cercanía con los suyos: en toda la Biblia, el Padre tuvo una relación íntima con su pueblo, y hoy en día, todos los que han recibido a Jesucristo como Salvador, se han convertido en parte de la familia de Dios.
El Padre Celestial desea tener una relación estrecha con cada uno de sus hijos, puedes disfrutar de esta cercanía al comprometerte con Él en su Palabra y en la oración.
La cercanía viene de una comunión cada vez más profunda que te lleva a un mayor entendimiento de Dios, de su Palabra y de su voluntad para tu vida, a medida que pasas tiempo con Él y lo obedeces, el Señor comienza a conformarte a su imagen, luego trabaja a través de ti, y lo reflejas a quienes te rodean, como una luz puesta en un candelero
(Confirma esta verdad leyendo el evangelio según Mateo 5:14-16).
No te permitas quedar satisfecho solo con ser salvado de la ira venidera, el Señor desea que lo conozcas íntimamente, y te llama a a corresponderle con fe y compromiso, Él quiere que seas como Abraham, quien es tiernamente descrito como amigo de Dios
(Confirma esta verdad leyendo el 2do libro de las Crónicas de los reyes de Judá 20:7).
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